El juicio contra Daniel Sancho, acusado del asesinato premeditado del cirujano colombiano Edwin Arrieta, concluye este jueves 2 de mayo en el Tribunal Provincial de Samui (Tailandia) con un alegato del acusado que ha durado cerca de 45 minutos.

La última sesión del proceso contra Sancho, el cual comenzó el 9 de abril, ha concluido un día antes de lo previsto. El magistrado, cuya identidad es confidencial, ha marcado la fecha de la lectura de la sentencia para el 29 de agosto a las 10 de la mañana.

El juicio se ha celebrado en completa confidencialidad y en medio de una enorme atención mediática. Ha contado con un total de 12 sesiones y alrededor de 35 testigos. Por parte de Daniel Sancho, han asistido sus padres, Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo. También han acudido a las vistas representantes de la Embajada de España en Tailandia, protocolo habitual al tratarse de un compatriota acusado de un delito que puede ser castigado con pena de muerte. 

La Fiscalía ha tratado de demostrar a lo largo de todo el juicio que Daniel Sancho asesinó de manera premeditada a Edwin Arrieta el pasado 2 de agosto en la isla de Phangan, cercana a Samui, en la que ambos habían quedado ese día. Al español también se le acusa de la ocultación del cuerpo, por el descuartizamiento de Arrieta, cuyos restos fueron esparcidos por varios lugares de la isla.

Sancho se declaró no culpable del asesinato premeditado, el delito que conlleva la pena máxima, y de la destrucción de documentación ajena durante el primer día del juicio, cuando solo aceptó el cargo de ocultación del cuerpo. La defensa ha alegado que Sancho actuó en defensa propia tras un intento de violación por parte de Arrieta y que la muerte del cirujano colombiano en la villa de Phangan se debió a un accidente durante una pelea.

El español permanece en prisión provisional desde el pasado 7 de agosto en la cárcel de Samui, desde la que se ha desplazado en un furgón policial para atender al juicio y en la que ha vuelto a ser ingresado este jueves.