El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Loja, en la comarca del Poniente de Granada, en funciones de guardia, ha ordenado este jueves el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del varón de 23 años detenido como presunto autor de la muerte de un joven en Íllora. Inicialmente, se le atribuye la presunta comisión de un delito de homicidio.

Así lo ha señalado el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, que ha detallado que la juez ha tomado esta decisión a petición de la Fiscalía y de la acusación particular. Durante su comparecencia, el detenido se ha acogido a su derecho constitucional a no declarar.

Además, la juez también ha tomado declaración a un testigo de los hechos. Por la fecha en que sucedieron, la causa la investigará el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Loja.

Los hechos se desencadenaban con la muerte, en la mañana de este pasado lunes, de un joven de 19 años, después de haber sido víctima de una agresión en Íllora en el marco de la celebración de sus fiestas mayores. En concreto, fue tras una pelea de madrugada dentro del recinto ferial, cuando el chico habría recibido un golpe, impactando su cabeza contra un bordillo de una calle adyacente al caer el suelo.

Amenazas y golpes según los testigos

Algunos de los testigos que forman parte de las diligencias de investigación abiertas por el presunto homicidio del joven de 19 años fallecido el lunes en la feria de Íllora han asegurado que el detenido le había amenazado de muerte y que le golpeó antes y después de que cayera al suelo y se diera contra un bordillo.

Los testigos que han declarado desde que tuvieron lugar los hechos han recalcado que amenazó de muerte a la víctima. Asimismo, según las referidas fuentes judiciales, los testigos directos de la agresión han indicado que el joven fue golpeado tanto antes como después de caer al suelo, momento en que se habría dado contra un bordillo.

Un accidente según la familia del acusado

Por otra parte, Pedro Jiménez, hermano del joven de 23 años detenido, ha atribuido lo ocurrido a un accidente y ha asegurado que, cuando su familiar se ausentó del lugar de la agresión, desconocía que la víctima hubiera fallecido. 

En declaraciones a los periodistas a las puertas de los juzgados de Loja (Granada), donde a primera hora de este jueves el arrestado ha pasado a disposición judicial, ha defendido la inocencia de su hermano y ha asegurado que no es problemático y que está "limpio", dado que carece de antecedentes penales y que "solo tiene una denuncia por un coche mal aparcado".

Jiménez ha lamentado además que todo el pueblo de Íllora, "con el alcalde en cabeza", haya consentido los ataques contra propiedades de su familia, que tuvo que ausentarse del pueblo -ha argumentado- porque "más vale prevenir que curar", dado el "racismo que existe contra" la comunidad gitana como ya ocurrió en un pueblo de Jaén.

El hermano del arrestado ha insistido en que quieren justicia y ha dicho que, si su hermano hubiera querido matar a la víctima, "podría haber cogido una pistola", pero que "todo lo ocurrido obedeció a un accidente". "Fue involuntario, él no quería matarlo (...).Unos amigos discutieron entre ellos en la caseta", ha explicado Jiménez, que se ha personado en los Juzgados de Loja para intentar hablar con el abogado de su hermano con ocasión de su declaración judicial.

La familia agradece el apoyo y pide que se haga justicia

La familia del joven fallecido ha agradecido las muestras de apoyo recibidas estos días y se ha mostrado confiada en que se haga justicia. "Confiamos en el derecho, como expresión máxima de la voluntad humana de convivir; y confiamos en la justicia para que haga responder de manera implacable a los autores de este crimen", han señalado en un comunicado remitido por el bufete de abogados A&R.

A través de la nota han agradecido "las incontables y sinceras muestras de afecto y cariño" que han recibido con motivo de la muerte de su familiar "en circunstancias tan desgraciadas", y han agregado que "nuestro Juan era un joven lleno de vida, deportista, buen estudiante, enamorado y feliz".

"Su pérdida ha roto nuestras vidas, y las de todos aquellos que le conocieron y le querían. Nuestro hijo fue educado en los valores del respeto, la convivencia pacífica, y en el amor, valores de los que carecen aquellos que, con total desprecio, de manera violenta y ruin, y sin ningún sentido, le han quitado la vida", han indicado, destacando que su "dolor es inmenso", y que "jamás" podrán "llenar el vacío" que les "ha dejado".

"Nos han arrebatado a nuestro Juan, pero no van a llevarse también nuestras convicciones que son ahora más firmes", han afirmado en la convicción de que los responsables "deben pagar su deuda con nosotros y con la sociedad".

El suceso ocurrió el pasado lunes poco antes de las 06:40 horas, cuando varias personas alertaban al servicio de emergencias 112 Andalucía de que un joven había sido víctima de una agresión en la calle Diego de Siloé de este municipio granadino.

Fueron movilizados efectivos de la Guardia Civil, la Policía Local y la Empresa de Emergencias Sanitarias (EPES) 061, cuyos facultativos trasladaron al herido al hospital de Granada, donde ingresó en el área de Traumatología, ya fallecido. El martes al mediodía se entregaba en la Comandancia de la Benemérita en la capital granadina el único investigado por estos hechos, para el que se decreta ahora prisión provisional.

A raíz de este trágico suceso, el Ayuntamiento decidió suspender las fiestas patronales y decretó tres días de luto en esta localidad del Poniente granadino, donde en la tarde noche del lunes se registraron diversos incidentes -con asaltos a viviendas y vehículos de la familia del presunto homicida- tras una concentración vecinal pacífica.

Varias asociaciones en representación del pueblo gitano han presentado denuncias por estos asaltos, por los que la Guardia Civil también ha identificado a sus posibles autores.